Les cuento. Este pasado lunes fue el cumpleaños número 4 de nuestra princesa Camila. Desde la mañana oramos para que Dios nos diera un buen día y que nos ayudara a celebrar con la beba su cumpleaños y que ella tuviera un bonito y divertido recuerdo de ese día. Su regalo fue la respuesta a su oración por un barbie varón (Ken)... Dios le regaló dos.
Al llegar a su colegio le pusieron una corona y le cantaron cumpleaños. Todos sus amiguitos y maestros la recibieron con mucho cariño. Nos encantó que les dijo a todos que Dios le había respondido su oración y le habían regalado 2 barbie boys (varones) o Kens.
Mi esposa Yokasta y yo salimos corriendo a comprar globos, bizcocho y picaderas para hacerle una pequeña fiestecita a la niña en su escuela al mediodía. Ella estaba feliz y aunque le tomó de sorpresa encontrarnos a todos en una habitación con luces apagadas y cantando cumpleaños, luego la pasó muy bien... Además de la sorpresa de que, no sólo Dios le había regalado 2 barbie boys, sino que Ms. Moux (La Directora de la Escuela) le había regalado un tercero barbie boy.
Tuvimos una loca idea y cerca del final del día de escuela, decidimos llevar a la niña a Chuck E. Cheese's ©... junto a otros 7 de sus amiguitos... Los mayores pensaban que estábamos locos. Íbamos gritando y cantando todo el camino. La pasaron súper bien y luego los fuimos entregando a sus padres. El día estuvo lleno de risas, alegría, regalos, besos abrazos, jugar... Dios fue muy bueno con nosotros y todos llegaron a casa sanos y salvos... Todos menos Camila, mi esposa Yokasta y yo.
A mitad del camino de regreso a casa, esperando que un semáforo cambiara de rojo, un señor se estrelló con nosotros causando ligero daño a nuestro carro, pero tremendo susto a nuestra cumpleañera y dolor de cuello y espalda a mi esposa y a mi... Camila estuvo llorando por cerca de 45 minutos... El fuerte ruido la asustó bastante y saber que alguien nos golpeó, la puso muy nerviosa. El "Día Malo" había llegado.
Después de 30 minutos esperando por un policía, hicimos un reporte del accidente y comenzamos a conducir hacia nuestra casa. La niña estaba más tranquila, pero el dolor de nuestras espaldas y cuellos estaba creciendo. Por recomendaciones del policía, fuimos esa noche al hospital porque no quisimos llamar un ambulancia.
Todo terminó bien. No tenemos fracturas. Sólo un par de músculos lastimados. Terminamos comiendo bizcochitos de Playdoh © (masilla) junto a Camila, ya que al salir del hospital, pasamos por la juguetería y le compramos un juego de pastelería de parte de sus abuelitos en República Dominicana.
Por tanto, tomen toda la armadura de Dios, para que puedan resistir en el día malo, y habiéndolo hecho todo, estar firmes.
El "Día Malo" no tiene que ser todo un día... El "Día Malo" puede ser "el Mes Malo", el "Fin de Semana Malo"...La "Hora Mala"... Es ese momento donde el enemigo de nuestras almas ataca de manera directa, provocando situaciones difíciles e incómodas... incluso peligrosas como la nuestra. Gracias a Dios habíamos presentado nuestro día y Dios nos protegió.
Que bueno que en Jesús tenemos protección y cuidado... y podemos tener la confianza de que nuestro hermano mayor ha abierto el camino de vuelta a nuestro hogar y nuestro Padre. Sólo tenemos que pedir.
¿Estás listo para el "Día Malo"? ¿Le pides a Dios de manera constante para que te proteja y te guarde? El "Día Malo" siempre llega... La pregunta es: "¿Estás listo?"...
JUST SAYING!!!
Pastor D
David Pimentel
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