jueves, 11 de septiembre de 2014

Tragedias

Hace 13 años, en medio de una mañana común algo descomunal sucedió... En un plazo de 102 minutos, dos de los monumentos más emblemáticos de todos los tiempos fueron destruídos por dos aviones que se estrellaron contra ellas y junto a ellos, cerca de 3,000 personas perdieron la vida, otras 6,000 personas resultaron heridas... y la manera en que todo es hecho cambió para el resto de la población mundial... Este evento cambió nuestra manera de viajar, nuestra manera de ver a personas de otras razas... Las tragedias hacen eso... Nos cambian...

Tenía un profesor de Cálculo en la Universidad que siempre bromeaba con nosotros... Escribía los problemas en las pizarras y mientras lo hacía, nos decía de manera burlona: "ay que dolol" (ay que dolor)... Para los que no saben qué es Cálculo, no hablo de los cálculos o piedras (calcificaciones) en los riñones... aunque duelen igual... Jajaja... El Cálculo es la parte de las Matemáticas donde se dividen los Ingenieros y los Técnicos... Es tan difícil y complicado, que en los exámenes puedes tener una tabla con las fórmulas que puedes usar en los problemas... Es una de las materias que todavía le busco aplicación, pero ese esa es otra relexión... "Cuando lo que Vivo HOY no me sirve MAÑANA", o algo así.. Pues este profesor, aparentemente buscaba los problemas más difíciles al punto que los alumnos que pasaban con A eran genios, B eran brillantes, los de C eran excelentes, los de D eran muy buenos... Yo pasé con A... Luego les cuento... Un día, este profesor nos dio un examen sorpresa de un sólo problema. Después de 1 hora y 30 minutos tratando de solucionarlo, incluso en grupos, un alumno le dijo: "Este problema no tiene solución", y el profesor dijo: "Si no tuviera solución sería una tragedia, no un problema"...

En la vidas tenemos miles de problemas que en su momento nos hacen sentir que son tragedias, pero con el tiempo, nos damos cuentas de que sí tenían solución, habiendo nosotros aplicado la solución o habiendo aprendido la solución que pudimos haber aplicado... Y en esos momentos podemos escuchar la voz en nuestra cabeza: "ay que dolol"... Y de pronto nuestros problemas parecen tragedias porque aparentan no tener solución.

El Rey David en la Biblia pasó varias tragedias, pero la más cercana a mi corazón es la siguiente. David no sólo había sido infiel, sino que había asesinado a su amigo para poder encubrir el embarazo de su infidelidad... Entonces, el profeta Natán lo visita, lo confronta y le hace saber que Dios no está contento con su pecado... El hijo de esa infidelidad, moriría:

18 Al séptimo día, el niño murió. Los consejeros no se atrevían a decirle nada a David, porque pensaban: «Si cuando el niño aún vivía, le pedíamos que comiera y no nos hacía caso, ahora que el niño ya murió, es capaz de hacer una tontería». 19 Pero David se dio cuenta de que sus consejeros le ocultaban algo, y comprendió que su hijo ya había muerto. Entonces dijo: —Ya murió el niño, ¿verdad?... Y los consejeros le contestaron: —Sí, ya murió.
20 De inmediato David se levantó del suelo y se bañó, se perfumó y se cambió de ropa. Luego fue a adorar a Dios a la carpa donde estaba el cofre del pacto, y cuando regresó a su casa pidió que le sirvieran de comer, y comió.
21 Sus consejeros le preguntaron: —¿Por qué hace esto Su Majestad? Cuando el niño aún vivía, usted no comía y lloraba mucho por él, y ahora que ha muerto, ¡usted se levanta y se pone a comer!
22 David les contestó: —Mientras el niño aún vivía, yo no comía y lloraba porque creía que Dios me tendría compasión y sanaría a mi hijo. 23 Pero ahora que ya ha muerto, ¿qué gano con no comer? No puedo devolverle la vida, ni hacer que vuelva a estar conmigo. Más bien, algún día yo moriré e iré a reunirme con él.

Después de que el Rey David atravesó un período de ayuno esperando que Dios sanara a su hijo, tan pronto el niño murió, se puso de pie y regresó a su vida normal... Su repuesta: "Ahora que ya ha muerto, ¿qué gano con no comer?"

Las tragedias nos cambian... nos sacuden... y para David, no sólo fue tragedia la muerte del niño, sino estar consciente durante 7 días que aunque el niño estaba vivo... moriría... Durante 7 días lloró a un niño vivo... 

Todos procesamos las tragedias y las pérdidas de manera diferente, pero el elemento común para todos es que sólo YO puedo procesar mis tragedias... puedo y debo buscar consejería... puedo escuchar las historias de otros, pero sólo la manera en que YO procese mi tragedia dictará la manera en que mi tragedia me cambiará...

Dos cosas: 
1. No conviertas el problema en tragedia. Lucha por encontrar la solución y resuelve tu problema.
2. Al igual que en las Torres Gemelas, las tragedias siempre buscarán torres en tu vida para derrumbar... Identifica las torres en tu vida... Por el momento no importa si son torres positivas o torres negativas... pero si debemos saber cuáles son esos puntos donde los aviones de la tragedia pueden golpearnos... Y cuando te visite la tragedia (no dije "si te visita", dije "cuando te visite"), PROCESA tu tragedia... no la pases por alto... no la "superes" en apariencia, cuando tu interior todavía duele... no pretendas haber atravesado lo que todavía transitas...

Identifiquemos las torres de nuestras vidas porque las tragedias vendrán contra ellas... Las tragedias nos cambian... y es nuestra decisión que nos cambien para bien y no para mal.

JUST SAYING!!!


Si vives en Boston y no tienes una comunidad de creyentes con quien reunirte ("Iglesia"), te invitamos a que nos visites en "Connected Lives" (Vidas Conectadas). Estamos estudiando la vida de los 12 Apóstoles en la serie: "Los 12 APuéstoles: Apuéstoles que todos podemos ser seguidores de Jesús..." Nuestras reuniones son en las casas, todos los viernes a las 7:30p.m. Si quieres que te visitemos y hagamos una reunión en tu casa, sólo déjanos saber... Será un honor servirte. Más información: 617-318-7422 y 617-407-2381.

Ven y hagamos vida juntos... Seamos la Iglesia...

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